No dejes abierta la puerta de la lavadora
El sol abrasador y las altas temperaturas y humedad no sólo hacen que la gente se sienta sofocada e insoportable, sino que también suponen importantes desafíos para los electrodomésticos.
Como uno de los electrodomésticos de uso común, el uso de lavadoras afecta directamente la higiene y la salud del hogar.
Muchas personas tienen algunos conceptos erróneos cuando utilizan lavadoras, especialmente cuando están acostumbradas a mantener la puerta abierta durante mucho tiempo. Si bien este enfoque puede parecer inofensivo, en realidad esconde muchos riesgos desconocidos.
Razones por las que no se deben dejar abiertas las puertas de la lavadora durante mucho tiempo:
En el verano caluroso y húmedo, el aire húmedo es un caldo de cultivo para bacterias y moho. Ya hay humedad residual dentro de la lavadora. Si la puerta se abre durante mucho tiempo, la humedad seguirá acumulándose, lo que favorece el crecimiento de diversos microorganismos.
Estos microorganismos no sólo se adhieren a las paredes internas y a las juntas de goma de la lavadora, sino que también pueden invadir componentes más ocultos, afectando así a la higiene y la eficacia de limpieza de la lavadora.
Lo que es más grave, estas bacterias y mohos también pueden transmitirse a través de la ropa, afectando la salud de los miembros de la familia.
Además, los ambientes húmedos también pueden provocar un envejecimiento acelerado de los componentes internos de la lavadora, como las juntas de goma y las bisagras de las puertas, debido a la exposición prolongada a la humedad, lo que reduce la vida útil de la lavadora.
Al mismo tiempo, el exceso de humedad también puede provocar un olor desagradable en el interior de la lavadora, que es difícil de eliminar. Con el tiempo, la ropa también puede desprender estos olores desagradables después del lavado.
Malentendidos y prácticas correctas en el uso de lavadoras
Algunas personas suelen creer que cuanto más detergente se utilice, más limpia quedará la ropa. Sin embargo, este enfoque es realmente incorrecto.
El exceso de detergente para la ropa no sólo dificulta el enjuague completo, sino que también deja residuos en la ropa, que pueden acumularse con el tiempo y causar fácilmente alergias en la piel.
La forma correcta es añadir una cantidad adecuada de detergente para ropa según la capacidad de la lavadora y el grado de suciedad de la ropa. Generalmente, la cantidad estándar de detergente para ropa es la mitad de la tapa de la botella de detergente para ropa, que debe aumentarse o disminuirse según la situación de la espuma.
Muchas personas pasan por alto la clasificación de la ropa al lavarla, y el lavado mixto puede causar fácilmente la permeación del color, especialmente en ropa nueva o de colores más oscuros, que son fáciles de teñir.
El método correcto es lavar la ropa de colores claros y oscuros por separado, y especialmente la ropa sucia también debe lavarse por separado para evitar contaminar otras prendas.
La temperatura del agua para lavar la ropa también es una preocupación. Algunas personas tienden a usar la misma temperatura del agua para lavar toda la ropa, pero diferentes materiales de ropa requieren diferentes temperaturas del agua para mantener su textura y color.
Por ejemplo, la ropa de algodón es adecuada para limpiar con temperaturas de agua más altas, lo que puede eliminar mejor las manchas y las bacterias, mientras que la ropa hecha de seda o lana requiere temperaturas de agua más bajas para proteger las fibras de la deformación y la formación de bolitas.
Por tanto, lo correcto es elegir la temperatura del agua adecuada en función del material de la ropa y de las instrucciones de lavado.
Otros conceptos erróneos comunes sobre el lavado de ropa y medidas preventivas
En el uso diario de las lavadoras, no sólo debemos prestar atención a la cantidad de detergente y a la clasificación de la ropa, sino que también existen otros conceptos erróneos habituales que debemos evitar.
Por ejemplo, muchas familias pasan por alto la limpieza periódica de las lavadoras.
Si la rejilla del filtro y el cubo interior de la lavadora no se limpian con regularidad, se acumulará una gran cantidad de fibras de tela, pelos y otros residuos, lo que no sólo afecta el efecto del lavado, sino que también puede convertirse en un caldo de cultivo para bacterias y moho. .
Se recomienda limpiar la rejilla del filtro al menos una vez al mes y utilizar agentes de limpieza especializados para limpiar el tambor interno de la lavadora cada seis meses para mantener la limpieza interna de la lavadora y extender su vida útil.
Además de la limpieza habitual a máquina, es igualmente importante el manejo de la ropa después del lavado. Muchas personas están acostumbradas a dejar la ropa lavada en la lavadora durante mucho tiempo, lo que puede provocar que crezcan bacterias en la ropa y produzcan olor a moho.
El enfoque correcto es quitarse inmediatamente la ropa y secarla al aire libre después de lavarla, lo que no sólo previene el crecimiento de bacterias sino que también previene eficazmente que se enmohezca.
El uso de auxiliares de lavado durante el proceso de lavado también es un detalle que a menudo se pasa por alto; por ejemplo, las bolas de lavado pueden reducir la fricción entre la ropa y proteger las fibras de la ropa de daños durante el proceso de lavado.
Las bolsas de lavandería se pueden utilizar para lavar la ropa interior y otras prendas vulnerables por separado, para evitar que otras prendas las tiren o dañen durante el proceso de lavado.
El uso de estas pequeñas herramientas, aunque sencillo, es extremadamente eficaz y puede mejorar significativamente la eficiencia del lavado y proteger la apariencia de la ropa.
Utilizar correctamente una lavadora no es una tarea complicada, pero sí que requiere que prestemos más atención en nuestro día a día. Cada pequeño hábito de funcionamiento puede tener un impacto significativo en la eficacia y vida útil de una lavadora.
Se recomienda que cada miembro de la familia aprenda y domine la forma correcta de utilizar una lavadora, con el fin de garantizar la limpieza e higiene de la ropa del hogar y alargar la vida útil de la lavadora.
Con sólo un pequeño cambio y atención, la lavadora puede convertirse en una ayuda más fiable en nuestra vida diaria.